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Una cita con Michelle Obama

Actualizado por última vez en: 17 enero, 2018

Las elecciones americanas han ocupado numerosas portadas estos último años, y de hecho con el anuncio de los resultados electorales de hoy, seguirán probablemente siendo una tema de lo más candente durante algún tiempo.

Michelle Obama sin embargo, será recordada como una primera dama estadounidense de lo más carismática y querida.

Una mujer energética y divertida que ha conseguido robar los corazones de miles de seguidores con su alegría y su determinación.

Una primera dama que de hecho ya robó el corazón de Barack Obama en el año 1989 cuando estaba trabajando en el bufete de abogados de Chicago Sidley & Austin y se convirtió en la mentora de Barack Obama. ¿Cómo empezó su historia de amor?

Una primera cita de película

Michelle Robinson empezó a salir con Barack Obama hace casi 30 años. De hecho, su primera cita ha sido trasladada a la gran pantalla recientemente con la película: Southside with you. Una versión hollywoodiense que recrea su primerísima cita que acabó en el cine viendo la película Do the right thing sobre el peligro de la segregación y del odio racial.

Una cita de lo más intensa en la que pasaron todo el día juntos, caminando y charlando así como visitando el Instituto de arte de Chicago. Una cita sofisticada y romántica entre el encantador Barack Obama y la captivante Michelle.

De hecho, fue una primera cita bastante intensa y completa ya que aprovecharon para conocerse en profundidad el uno al otro, sus particularidades, sus gustos, frustraciones, ambiciones y deseos.

Una perfecta manera de asentar las bases para una relación amorosa sana y duradera.

Al lado de un gran hombre hay una gran mujer

Tras su matrimonio en 1992, la carrera política de Barack Obama empezó a despegar. Aunque ambos han confesado que criar una familia junto con el estrés de la vida política podía llegar a ser una gran desafío a veces, ambos consiguieron entregarse por igual en su relación para ponerle el rumbo que ellos desearon.

Desde que Michelle Obama se convirtió en primera dama en 2009, ha demostrado que las relaciones amorosas y el éxito pueden ir perfectamente de la mano siempre y cuando exista equilibrio y respeto en la pareja.

Una mujer fuerte de lo más carismática que ha dado una lección al mundo: en realidad una gran mujer está al lado de un gran hombre. 

El amor y la ambición pueden llegar a funcionar a la vez en las parejas: siempre y cuando ninguno de los dos se quede detrás de la otra persona. Y es que no siempre hay una gran hombre, si este necesita una gran mujer detrás, y vice versa.

Michelle Obama es una mujer independiente que celebra el amor y el romance respetuoso allá donde va.